lunes, 4 de diciembre de 2023

PALESTINA

 


La definición de lo que está ocurriendo en Gaza podría definirse como la ausencia de paz y nos evitaríamos así definir con palabras la brutalidad que está perpetrando el gobierno sionista israelí.

Ahora las imágenes llegan al instante por las redes sociales y no puede decirse que las televisiones eligen, manipulen o tergiversen puesto que están grabadas con un teléfono móvil de un familiar o personas que quieren que se sepa lo que está ocurriendo, quizá con la esperanza de que pare la matanza indiscriminada.

Una niña de unos dos años entra en brazos de su padre a un hospital, un móvil va siguiendo la escena y no deja de grabar ni cuando el padre se sienta en el suelo y muestra, a quien pueda ayudar, a su hija literalmente destripada. El padre sujeta los intestinos de su hija y, sinceramente, no sé cómo termina la grabación porque resulta insoportable seguir viendo su sufrimiento.

“La guerra rasga, desgarra. La guerra rompe, destripa. La guerra abrasa. La guerra desmembra. La guerra arruina”, escribió Susan Sontag en el ensayo “Ante el dolor de los demás” en 2003. Ella, que sufrió el asedio de Sarajevo, reflexionó sobre el peso y la influencia de las imágenes en las guerras y en qué nivel perjudica o beneficia para tomar conciencia del sufrimiento ajeno.

              Se puede dejar de ver imágenes de palestinos asesinados por diversos motivos, incluso para preservar la salud mental, pero nadie hoy en día puede decir que no sabe lo que está pasando en Palestina.

sábado, 5 de noviembre de 2022

60

 

 Temo haber vivido mi vida como si ello fuera un simulacro.
Como si yo tuviera el don de vivir por mí dos veces.
De haber dejado a un lado la que importa en prenda de una vez futura,
y haber malgastado en borradores la presente.

De no saber que la vida sucede a medida que sucede,
y que no hay una vida en serio y otra vida de licencia.
Que cada ensayo, cada error, en suma, forman
las constantes y variables del álgebra de la existencia.

Y en esa ecuación que es cosa resuelta estamos.
Esbozada débilmente en el margen de un folio en blanco.
Siento no haber sido tan audaz de un trazo algo más firme.
De haber perdido un tiempo de oro en pruebas y en ensayos.

Y ahora es tarde,
algo tarde.
Pues temo ir ya malherido.
Temo haberme consumido
como si yo
tuviera el don
de vivir dos veces.

Temo haber vivido mi vida como si ello fuera un simulacro.
Y he sido un mal actor confiando en la noche del estreno.
Pero qué vida será la que prolongue o dé segundas funciones,
si en ella todo es rol improvisado y relleno.

Temo haberme pasado la vida reuniendo el valor que me falta,
y declarando intenciones solemnes frente a un espejo.
Dejando las cosas para una mejor ocasión que no llega.
En el fondo he estado siempre en babia y con la mente muy lejos.

Temo haber vivido mi vida como si ello fuera un simulacro.
Como si yo tuviera el don de vivir por mí dos veces.
De haber dejado a un lado la que importa en prenda de una vez futura,
y haber malgastado en borradores la presente. 

 

 

 Habrá que intentar pasar el borrador a limpio. Con 60 ya va corriendo prisa.

 

Tributo a Rafael Berrio. 

 





sábado, 16 de julio de 2022